Foto cabecera

AMFAv "EN EL DESPACHO" (JMS)



NAVIDAD, LOS BEATLES Y LA SAGRADA FAMILIA.




                       En 1965 era evidente que algo se movía en España con referencia al resto del mundo. El aislamiento exterior abría rendijas por las que el nombre de nuestro país empezaba tímidamente a encabezar párrafos en la prensa extranjera sin tratar de dictadura, sentencias o represión.

                       En marzo, el equipo del Real Madrid de baloncesto se hacía con el Campeonato de Europa. La presencia de nuestros artistas plásticos contemporáneos había sido noticia en diversas exposiciones internacionales. Pero nada en comparación a lo que significaron las dos actuaciones de los Beatles los días 2 y 3 de julio en Madrid y Barcelona, por la atención que atrajo.

                      Al mismo tiempo, en silencio, en un plano íntimo sólo conocido por el equipo constructor que arrancaba de su postración las obras de la Sagrada Familia, en las Navidades de ese mismo año y rodeada por los grandes bloques de granito que levantaban el portal de la Fachada de La Pasión, una minúscula piedra encontraba el huequecillo preciso para quedar fijada en esos muros donde Josep Mª Subirachs dos décadas más tarde iba a escenificar la Pasión y muerte de Jesús.

                       Aquel fragmento mineral, verso libre que conociera el paseo de Cristo desde la casa de Herodes a la de Caifás y su ascensión por el mismo itinerario hasta el lugar de su crucifixión, procedía del monte Calvario de Jerusalén, también llamado Gólgota (calavera), lugar preciso en el que 2000 años antes se habían desarrollado los acontecimientos llamados a dar un giro a la civilización. Traída de mano en mano desde su lejano origen por los misioneros franciscanos que la custodiaron durante años, con la esperanza de que un día se retomarían las obras del templo y la piedra sería colocada, reposando por fin en su destino natural. 


1965. Enero


(EugeniForcano)

En esta secuencia de cinco fotos, desde 1965 a 1976, podemos apreciar la gran labor
realizada en la fachada de La Pasión a partir de las donaciones, donativos y colectas.


El monte Calvario, o Gólgota, y detalle de la zona llamada La Calavera, de donde procede la pequeña piedra.



50 ANIVERSARIO. LA PIEDRA DEL CALVARIO 

(2/2) HAMBRE DE PIEL




Continúa...
                     

Máscaras de los lugares 
 donde alienta el Espíritu. 
                
    Yo os saludo en el silencio...

Agustín Ngongo

   

                            Sobre el lecho, dos máscaras y dos sombreros emplumados enmarcaban la cabecera de Mame Barlet y su esposo.  

                     - Los blancos desprecian nuestra cultura, la  escupen, la pisotean. Pero nosotros debemos respetarla –confió un día Mame Burlet a Jamaii ante el asombro de la adolescente, que la consideraba una mujer culta a la manera europea, muy por encima de las supersticiones-. Escucha bien, Jamaii: Una máscara no es tan solo un pedazo de madera labrada. El árbol del que procede ha sido cortado entre cien y esa madera no puede tocarse sin antes haber efectuado un sacrificio para escapar a la cólera de los dioses de los bosques. Un brujo ha bendecido la madera y el propio tallista se ha purificado, ha meditado y ayunado antes de dar principio a su trabajo. Es la búsqueda del Irreal, del Impalpable, del Intocable, de lo Desconocido que tanto nos obsesiona, y esa búsqueda mística es tan válida como la búsqueda mística del Dios cristiano o nuestro Alá islámico. Nunca lo olvides y siéntete orgullosa de tu cultura.
                          
   Máscaras, sombreros y la cama negra con dosel de encaje podían tomarse como una concesión a la patria de la dueña, ya que el resto de la decoración de la alcoba era netamente mejicana. Las cortinas azulón y naranja parecían firmadas por Frida Khalo igual que la orfebrería de plata y los tapices que adornaban las paredes. Pero ahora que Jamaii había dejado de mirar por los cristales hacia la Fachada de La Pasión, observando la imagen dorada de la Resurrección que bajaba muy recta suspendida por el cable, los reflejos arrancados al sol ponían acentos de tam-tam en los amuletos, escondidos por la señora de la casa para conservar el amor de su marido y avivar su pasión.


   A la luz del mediodía que iluminaba la estancia tras su espalda, vio una hilacha de humo saliendo por debajo de la cama deshaciéndose en menudas nubes de incienso elevando sus hebras, más nueces de kola trabajadas con encantamientos milenarios que aparecían en platillos colocados medio ocultos por todos los rincones.   


   Dejó de bailar. El baile era una trampa que África tendía desde la lejanía a sus mujeres. Y Jamaii no quería irse de Europa, no quería volver a revivir el último viaje en barco hasta Dakar….


Scarlet Quezada (unomodels.com)

ENTRE DOS MUNDOS

HAMBRE DE PIEL (1/2)




Para saber decir Yo te amo, primero
hay que aprender a decir Yo.

Ayn Rand


RELATO              

 Original de
Ana Mª Ferrin      

R.P.I.
               

                        - ¡Lo que hay que medir es no pasarse!  ¡Ay! ¡Miseria y desgracia sobre mí!


   Con estas palabras dichas a gritos zanjó Sura la conversación con su hija, dando unos últimos pasos vacilantes hasta llegar al centro de la alcoba, ante el balcón. El balde de cinc contenía unos veinte litros de agua templada y el peso que soportaban las dos asas, llevadas con ayuda de su hija Jamaii, hacía vacilar a las mujeres hasta trastabillarse. Bamboleantes, depositaron el recipiente sobre la manta que protegía el parqué, derramando parte de su contenido humeante.

   La papada de Sura sobresale por encima del nudo del pañuelo gris con el que cubre su cabeza. Siempre que chilla a la niña, se le amorata el rostro y la garganta se le inflama como si estuviera a punto de reventar. Su temperamento sanguíneo la lleva a excitarse por lo más mínimo y al correr de los años –Jamaii ha cumplido quince-, su hija ha ido instalándose en el silencio con el alma encogida, esperando siempre el grito que azuza marcándole un ritmo de trabajo superior a sus fuerzas. Ausente, rebujada en el nido interior que potencia su naturaleza poco habladora. 

  La madre se seca las manos frotándolas, derecho y revés, por la gruesa tela floreada de la túnica, el bubu, a la altura de sus fuertes caderas y descorre las cortinas del balcón hasta recogerlas detrás de las estanterías, donde reposa una colección de cupidos y angelotes de porcelana. Por los cristales del balcón se ven los campanarios del templo de la Sagrada Familia con un despliegue de grúas y empleados, todos atentos a la imagen cobriza que baja pendiente de un cable por la fachada de La Pasión.

  Al recibir el impacto de la viga de sol que parte en dos la estancia en penumbra, Sura mete la mano en una abertura lateral de la falda sacando un pañuelo azul que desliza por su cuello, recorriendo con él la estrecha franja de piel sudorosa que se ve libre entre el traje y la pañoleta.

                           - ¡Tú! –dice dirigiéndose a Jamaii, que fija en ella sus grandes ojos color de kiwi pelado-: Me voy al mercado y después iré a encargar que le suban a Mame Burlet el árbol de Navidad. Tardaré una hora o así. ¡Ve rezando al Profeta para que no rompas ninguna figura! Ya te he explicado que las has de coger así -tomó una de las piezas por la cabeza y se la mostró-. ¡Así! ¿Lo ves? De una en una. La sostienes así dentro del balde, la frotas suave con la esponja, la secas y la vuelves a colocar en la estantería. ¡De una en una! ¡No vayas a echarlas todas a la vez dentro del agua y tengamos un disgusto! ¡Sólo unas gotas de gel de baño! ¿Eh? Me voy. ¿Tienes la paz? ¿Tienen tus piernas la paz? ¿Tiene tu cabeza la paz?

                    -  Sí madre. Mi cuerpo tiene la paz-, susurra Jamaii con los ojos bajos.

  Caminando hacia la salida del amplio apartamento de la plaza Sagrada Familia con pasos lentos, recreados, que hacen crujir la saya bajo el bubu, Sura escucha la respuesta de su hija, que a su vez oye la voz de la madre difuminando su retahíla de quejas al compás del carro de la compra , hasta que el golpe de la puerta al cerrarse anuncia su partida.



Scarlet Quezada en una imagen de Hairo Rojas


LA CUNA DEL ALMA

BARCELONA, SU ÁNGEL, Y TRES TOQUES DE YUNQUE



                          Bonita y escondida, la pequeña iglesia barcelonesa de Santa Ana es una joya románica del siglo XII poco conocida por los naturales de la ciudad, ya que reposa semi oculta tras sendos portales de rejas entre las calles Rivadeneyra y Santa Ana. Por ésta última es accesible, aunque tan sólo ciertos días y a ciertas horas.  

   Aún así, su humildad esconde un minúsculo claustro de obligada visita y un interior renacido tras una minuciosa restauración, de su destrucción (una más) durante la Guerra Civil.

   De este edificio, superviviente de lo que fue el monasterio de Santa Ana junto a la Puerta del Ángel en la muralla romana, partió la obra urbanística que derribó las murallas de Barcelona dejando hoy tan sólo las torres de la Porta Nova en la plaza de la Catedral como testimonio, abriéndose hacia los terrenos que la rodeaban. En este Punto Cero del progreso, la avenida de la Puerta del Ángel se desplegó extramuros en abanico para acoger en 1860 la primera piedra del Ensanche en el centro de la que sería más tarde la Plaza de Cataluña, espacio mayestático de 5 Ha, desde el cual, camino de la villa de Gracia, empezaría a construirse un paseo que estaba llamado a ser el orgullo de la ciudad, el Paseo de Gracia.


El Ángel Custodio. Obra de Jaume Huguet que puede verse en la Catedral

Iglesia de Santa Ana


Arriba, el desaparecido convento de Santa Ana durante su derribo, del que sólo quedó en pie la iglesia de Santa Ana. En la imagen inferior la plaza en la actualidad, Tras el primer edificio de la derecha, el Banco de España,  pervive la iglesia, encajada entre varias construcciones. Y entre el Banco y el segundo edificio se abre hacia la plaza, la avenida del Portal del Ángel, de donde partió el Ensanche barcelonés, como podemos apreciar en el llano superior.



NACE UNA METRÓPOLI

AMOR EN EL REFUGIO. 1938.




RELATO

Original de
Ana Mª Ferrin



                                Finalizada su restauración, en mayo pasado abrió sus puertas al público el refugio antiaéreo que se construyó durante la Guerra Civil en la Central de las Aguas de Cornellà de Llobregat, en Barcelona.

  Hoy Joan y Pepita en una conjunción de coloridos, azul oscuro en las ropas y blanco en sus cabellos, caminan mientras a sus espaldas el sol va formando una aureola que los enmarca. A ojos de quienes los ven pasar, son dos veteranos. Sin embargo, para ellos mismos siguen siendo la pareja adolescente que un lejano día de 1938 cruzaron por primera vez sus miradas bajo el amparo de los túneles que los protegían de un bombardeo. A pesar de los avatares vividos nada ha cambiado para ellos y siguen siendo eso, dos enamorados atravesando juntos la historia de este país, que en el tiempo transcurrido hasta 2015 ha experimentado un remolino de cambios.





Imágenes del Refugio Antiaéreo de las Compañía de Aguas. Cornella de Llobregat, Barcelona (*)


UN SÍMBOLO EN LOS CORAZONES

(2/2) FRÓMISTA 2015. XXVIII CERTAMEN DE PINTURA



Continúa...

                             Ya cuelgan los cuadros de las paredes de la Sala Boffard. El jurado ha tardado en emitir su veredicto pero así debe ser, el arte no es una regla de tres, es subjetivo por naturaleza. Si ya cuando estaban los artistas en la calle, en plena faena, se paraban los curiosos a valorar las telas deslegitimando a las que no consideraban correctas: 

  - Esto no se puede permitir. Esas casas no están ahí, están dos calles más abajo, así que tienen que anular este cuadro. Voy a hablar con el secretario....-, se encendía un vecino

 - No tiene importancia, hombre, los artistas buscan embellecer el paisaje y ponen cosas de su imaginación...-, trataba otro de calmarlo.

  Pero no había forma de convencer al seguidor del encuentro pictórico. Tuve constancia de que el motivo importaba, cuando al día siguiente me acerqué a la exposición y allí estaba otro aficionado irreductible, con una irritación notable:

  - ¿Lo veis? - explicaba a sus acompañantes- Ni las casas ni esos árboles están donde las ha puesto el pintor. Esto es para impugnarlo.     
  
  Las obras que colgaban de las paredes formaban una muestra de lo más variado, un gozo para los interesados en la pintura. Espero que al final el enfado quedara anulado por el éxito del conjunto expuesto. De todos modos, a ver si me entero...       

 1º Premio  Nº 14. Isabel Menéndez Izquierdo. Valladolid 

 2º Premio.  Nº16. Oscar Herranz Mínguez. Valladolid

3º Premio. Nº 6.  José Antonio Amelivia. Logroño

Accesit. Nº 9. Fracisco Tomás Medin. Cabrerizos (Salamanca)



PINTURA AL AIRE LIBRE. MUESTRA DE ESTILOS

JAMES ROBERTS Y SU INCUBADORA INFLABLE. PREMIO INTERNACIONAL DE INGENIERÍA JAMES DYSON 2014


                               Crepuscular, el campo de girasoles se extendía a ambos lados de la carretera. Septiembre agostaba los tallos humillando sus flores hacia el suelo, convirtiendo en estera el alegre paisaje. Durante unos diez kilómetros de recta castellana, aquellos cultivos a punto de recibir la cuchilla fueron el aburrido contrapunto a la noticia espumante que salía de la radio. Contaba el corresponsal en Inglaterra la idea que se le ocurrió a James Roberts, último Premio Internacional de Ingeniería James Dysson 2014, mientras veía en la BBC un documental sobre la tragedia de los campos de refugiados. Y cómo aquel estudiante de veinte años decidió en ese mismo instante, que a esos lugares donde cada año miles de recién nacidos prematuros morían por no disponer de una incubadora, dedicaría el esfuerzo de su Proyecto Fin de Carrera. El lema del Premio, Una solución para un problema, sería el suyo. Solucionaría el problema y salvaría esas vidas.                                
  
  Impactada por la historia de aquel joven de veinte años, seguía yo mi camino entre las plantas marchitas, cuando vi algo que me hizo barrer con los ojos los tres retrovisores hasta comprobar que no había peligro, y frenar. Lo hice para retroceder unos diez metros y comprobar el milagro de que a veces, en la naturaleza aparecen elementos que no se conforman con seguir la inercia de la resignación, ni el dictado que nos marcan las épocas. Allí, en el infinito paisaje de plantas resecas, un solitario girasol estiraba su cuello resistiéndose a doblarlo enfrentado al sol, amarillo contra amarillo. Como había hecho el novel ingeniero James Roberts, negándose a aceptar tantas muertes inocentes que un informativo presentaba como inevitables en los países sin recursos.


James Roberts y su incubadora inflable, MOM (*)

...Y allí, enfrentado al sol, amarillo contra amarillo, un girasol... (AMªF)

A CINCO PROBLEMAS, CINCO SOLUCIONES

ZENTANGLE


          
                 En el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, cuatro astrofísicos se encuentran en el estrado que preside la sala en espera de exponer sus ponencias sobre un nuevo planeta. El coordinador procede a su presentación con la breve biografía de cada erudito dando paso a que el nombrado desarrolle su teoría. El resto de componentes asisten atentos con la vista puesta en el conferenciante de turno, pendientes de sus palabras. Bueno. Todos, excepto uno que escribe pausadamente en el folio que descansa ante él.

   Una asistente al acto desde la segunda fila observa, que más que seguir una línea con su pluma, el escribidor realiza todos sus movimientos en una esquina del papel. Ni su brazo ni su muñeca se desplazan en las casi dos horas que durará la charla, su vista está centrada en un espacio de tres o cuatro centímetros y sólo dejará de hacer correr la tinta durante el tiempo que dure su propio parlamento. Intrigada, la espectadora decide resolver la incógnita al final del evento, acercándose hasta las hojas del orador.     


Imagen de la fotógrafa JuLie Vola (pinterest)
                                                 
           DEL TRAZO DISTRAÍDO AL ARTE                                     

"UN CUENTESITO DE TERRÓ"



A ti que buscas la soledad, 
este cuentecito verídico
de puro horror


RELATO
Original de
Ana Mª Ferrin      
R.P.I.       


     -¡SEVERINO!
          -¡Severino, ven aquí!
            -¡Severino, no te escondas que te veo!
              -¡Severino, como tenga que ir a buscarte, te
                 acordarás de mí!
                      
                     -¡¡¡SEVERINO!!!




ES-PE-LUZ-NAN-TE, MAMÁ 

GRECIA Y NUESTRO POETA ENRIQUE BADOSA


                    
                           Bandeaban los políticos por la televisión entre mares de intereses. Al tiempo, una farmacéutica de Atenas contaba al periodista entre lágrimas sus problemas de suministros por la indefinición de cuál sería el futuro de Grecia. De repente se disparó un resorte en mi memoria y apareció en el escenario la figura sonriente del poeta Enrique Badosa un lejano día de 2006, mientras lo escuchaba hablándome del honor que significó para él, que el gobierno griego le rindiera homenaje con un monumento a su poema:



                                             SALAMINA

Por esto ha sido escrito el Partenón
con la más bella tinta de la tierra.
Por esto se ha labrado el pensamiento
en la piedra más sabia y perdurable.
                   

                          Por esto estás hablando en lengua libre.






Tres imágenes del poeta Enrique Badosa. En Roncesvalles, en el puerto de El Pireo y en la inferior junto al
monumento colocado por las autoridades griegas en homenaje a su poema Salamina, que glosa la batalla naval
en que los griegos derrotaron al invasor persa el año 480 a. de C. (2)

"CAÍ EN LA TENTACIÓN DE LA PALABRA"

GAUDÍ Y JULIÁN SCHNABEL




                          ...En 1975 expuse en Nueva York, en Washington Square, un mural flotante titulado The History of War que denunciaba la guerra de Vietnam y entre los artistas que se encontraban allí, conocí a uno en particular con el que hablé largamente de Gaudi. Estaba especialmente interesado en el trencadis. Mas tarde, sus grandes telas realizadas con platos rotos han contribuido a su celebridad, se llama... Julian Schnabel...


Pedro Uhart, pintor y coleccionista de Antonio Gaudí (*)


Olatz


Schnabel junto a su cuadro, El pintor desconocido y la musa que nunca encontró


BÚSQUEDAS, ACIERTOS Y DESMESURA

EL MOVIMIENTO EN LA ESCULTURA



                   Robert Glen nació en Nairobi en 1940. La vida salvaje de mamíferos y aves lo sedujo desde su niñez más temprana, cuando quedaba absorto observando el planear de las águilas o el galopar de cebras y gacelas. Decir que su vida ha transcurrido al aire libre, entre expediciones científicas y la taxidermia, que fue durante años corredor de rallys en África y que posee una retina privilegiada para captar en sus esculturas de bronce el movimiento en libertad, no será necesario. Bastará echar una mirada a sus obras y ver relinchando en ellas, la pulsión indomable que no admite cercas. 

   Como los nueve caballos mustang que galopan con las crines al viento, salpicando de agua con sus cascos a los visitantes de Las Colinas en Irving, Texas. O al agua salpicando los cascos, qué más da. Sea como sea, la acción anclada en el instante.




Tres imágenes del impactante grupo escultórico Los mustangs de Las Colinas, en Irving, Texas 



LA REBELIÓN DE LO ESTÁTICO


(2) BARCELONA. EL CORAZÓN DE MI QUERIDA CIUDAD


                                 En esta segunda entrega de comercios preferidos, 
                                 otros protagonistas nos muestran su negocio.     
           
       
                        
                    Cuento para empezar, que me disponía a entrar en la centenaria Pastelería La Colmena después de haber fotografiado la placa honoraria de la acera, cuando una señora guapa de cabellos casi blancos me alargó unas hojas enrolladas y ceñidas por un hilo azul. Según dijo, eran un poema que me entregaba, A la voluntad.

  Me pareció excepcional que en estos tiempos una poeta pudiera sacarle beneficio a sus versos, así que contribuí a la salud lírica con una moneda. Deslicé la atadura y estiré los papeles, viendo que en el primero, impreso con tinta morada habían escrito sin firma un largo poemario que empezaba así:


Con tu corazón de chocolate
como abeja en colmena adocenada,
eres el helado de vainilla,
que sales de la colmena 
cubierto de nata y miel.
Eres el chocolate relleno de
nueces y avellanas,
la combinación perfecta.
 Tú me amas. 
 Aquí estoy, sintiendo que
                                                              me sientes…

                   
                           En ese tiempo y lugar sus líneas eran puro simbolismo. Levantar la mirada del escrito y ver cómo se hermanaban con el rótulo de la pastelería, con su panal, con sus abejas…


Josep Mª Roig acompañado de su esposa, sus hijos y su nuera, en el mostradpor de La Colmena. (AMªF) 


El puesto de venta de Som Naturals en una Feria de Artesanos.  

Las propietarias de Fotocopias Valencia, Magda y su hija Silvia en 2015. (AMªF)

El chef Marc Roig a la iz. con su hermano Jaume, maître de Can Pitarra. 2003 (AMªF) (*)



HOMENAJE AL MOSTRADOR

SUBIRACHS Y SU CRIPTOGRAMA (casi) MÁGICO EN LA SAGRADA FAMILIA



                            Respetando la tradición de la Semana Santa, compartamos la curiosa historia del criptograma de Josep Mª Subirachs. En la próxima entrada seguiremos con los avatares de los violoncelistas Pablo Casals y Guilhermina Suggia.
                           

   
                      En la Sagrada Familia, una visitante llegada de Teherán pasea con su hija de diez años, explicándole las actitudes que muestran los grupos de esculturas realizados por Josep Mª Subirachs para la Fachada de la Pasión.

  Como cualquier persa, lleva milenios de cultura en la piel, por eso le resulta un placer la contemplación del arte por el arte. Coge a la pequeña y se sienta en un banco frente a la izquierda de la fachada para observarla a sus anchas. Saca del bolso una hoja de información turística y empieza de verdad para ella la visita al templo. Se coloca las gafas oscuras sobre la melena azabache que campa a su aire y por un momento cierra los ojos absorbiendo el olor del plantío aromático del jardincillo. 

   La niña trepa sobre ella sentándosele encima. Y contagiada por la madre que le explica La Sagrada Cena, observa muy seria las esculturas chupando un trozo de coco.

                   – Mamá, ¿Por qué hay un perro detrás del asiento de Judas? –le pregunta. La madre responde:

                  –  Se refiere a la fidelidad traicionada.

                  –  ¿Y ese cuadrado con números? ¿Y esa serpiente?

                - Ese cuadrado se llama criptograma. Y si sumas cada línea de números, por cualquier cara siempre te dará treinta y tres. La serpiente nos está avisando de que el beso que Judas le da a Jesús no es sincero.

                   - ¿Y por qué los números suman treinta y tres, mamá?

              – Porque Jesús tenía treinta y tres años cuando Judas lo traicionó, cariño–.

  Con la sencillez con que se cuenta un cuento, la madre intenta explicar a su hija las raíces culturales a las que pertenece.

   Y eso que por ignorarlo, no puede contarle la verdadera sorpresa del criptograma, que sigue líneas abajo.


Tras la escena escultórica de El Beso de Judas, Subirachs colocó su criptograma 1997 (AMF)

Una de las puertas centrales de La Pasión en la Sagrada Familia, obra de Subirachs. Sobre la palabra
Jesús, en oro, una minúscula reproducción del criptograma bañado en oro. Abajo, detalle. 



Grupo de la Última Cena de Subirachs en La Pasión. 1997 (AMF)


 UN CUADRADO CON SECRETO PROPIO
          

BARCELONA. EL CORAZÓN DE MI QUERIDA CIUDAD (1)


               
           En este año que hemos visto desaparecer numerosos establecimientos que nos acompañaron durante generaciones, brindemos un homenaje a los comerciantes y pequeños empresarios que alegran nuestras calles acercando hasta nosotros productos y atención. Resistiendo y sirviendo de barrera laboral a todo tipo de crisis.

           Ellos y ellas con todo en contra, sin paraísos fiscales, diana siempre presente para atraer impuestos que raramente verán revertir en sus negocios, nos facilitan la vida levantando cada día el cierre de su local sabiendo que deberán gozar por decreto de una salud magnífica, porque no pueden permitirse enfermar y faltar un solo día a su cita diaria con el público, su único aliado. Cinco emprendedores. Cinco historias de profesionales que sacan a flote su medio de vida a base de buen hacer, amparados por la cultura del esfuerzo.



Dos Jaume Doncos, padre e hijo, ante su más que centenaria Casa Beethoven.
En el suelo ante la puerta, la placa Guapos per sempre. (AMF)

Der. la Gerente de Ediciones Experiencia, Araceli Caballero, con Marta Lope, responsable de
Ventas y Marketing (AMF)

Emmanuel Thomas, breve reposo a la entrada de su restaurante Le Bistrot. (AMF)

Hoy eran las 20,00 h. cuando Isabel Creixell echaba el cierre a su Salón, Temps per tu. (AMF)

Ante su tienda El gat pirata, Jessica Guerra junto a su amigo y Jefe de Seguridad, Grey. (AMF)


CINCO PROTAGONISTAS